Acaricio la antigua moneda de oro con pesar. Con él en la antesala de Caronte, lo veo a él, nos veo a todos nosotros. Palas Atenea entristecida en lo alto.
Tras hacer los deberes en la biblioteca le muestro el libro.
- It seems very old dad.
- It is. Here read this.
Mi pequeño lee en voz alta cómo Ulises y sus compañeros escapan de la cueva de Polifemo.
Despistado y perdido, Ulises mira su mapa...
jueves, marzo 07, 2013
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3 comentarios:
Cuando llega la barca, se contempla la vida. Vieja y gastada existencia. Por eso es bueno que la acompañe el ingenio.
Leía hace años en American Gods, una novela de Neil Gaiman que los dioses no mueren mientras alguien los recuerde. En cierto sentido veo a los dioses de la antigüedad clásica como arquetipos de valores eternos. Nosotros morimos, los dioses siguen allí mientras los recordemos.
Hace poco murió mi tío, alguien que era un ejemplo de esto que digo. Tengo por ahí un libro de mitología del año 20 que es lo que leía mi pequeño.
Saludos
Posiblemente, tu cita derive de una creencia de los aborígenes australianos. Mantienen que, aunque perezca el cuerpo, nadie muere en tanto en cuanto su recuerdo permanece en la memoria del Hombre. Solo cuando se le olvida entra en el Mundo de los Sueños.
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